miércoles, 19 de enero de 2011

La plaza y las palomas

Y miramos las palomas como si fuera normal que volaran. Como si fuese natural que un ser tuviera alas y planeara, y calculara el momento preciso, ese instante casi solemne para detenerse y apoyarse justo en la punta del sombrero de San Martín, o en la cola de su caballo.

Y le reprochamos a Dios no habernos dado alas... o habérnoslas quitado.

3 comentarios:

  1. Silvia, sabés que contás con mi apoyo incondicional, pero no hables bien de las palomas. Son ratas emplumadas y siempre lo serán.
    Es una advertencia (??)

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  2. Jajajaja, te voy a acusar con la sociedad protectora de animales por comparar a las ratas con las repugnantes palomas

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  3. El Perro Sabio21 enero, 2011 08:18

    Hace poquito aprendí a andar en bici, si es posible moverse a alta velocidad y maniobrar mas o menos decentemente sobre dos ruedas, planear tampoco debe ser tan complicado.
    Justo hace un par de días un amigo me comentó de unas zapatillas para correr sobre el agua, cada día la barrera de lo imposible se corre un poquito mas.

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