No es ni un deporte, ni siquiera un entretenimiento más. Tampoco una mera práctica social. Al igual que la técnica, el fútbol, nos guste o no, ya no sólo forma parte del ambiente, sino que es nuestro ambiente. Un ambiente del cual no podemos salir, que no podemos dejar de habitar, aunque queramos.
Una prueba está en el lenguaje: cualquier experiencia o sentimiento cotidiano puede ser (y de hecho, es) representado a través de una metáfora futbolera. La otra evidencia es la tapa del diario de todos los lunes.
Y porque mi blog no puede estar al margen de tamaño fenómeno social, hoy empieza una nueva sección:
Si bien no prometo precisión científica, intentaré poner mi más agudo ojo crítico frente a la realidad futbolística, tanto en lo que respecta a lo deportivo, pero sobre todo, a lo simbólico. Porque... ¿hace falta aclarar que si improvisás, te comés cuatro goles?
Una prueba está en el lenguaje: cualquier experiencia o sentimiento cotidiano puede ser (y de hecho, es) representado a través de una metáfora futbolera. La otra evidencia es la tapa del diario de todos los lunes.
Y porque mi blog no puede estar al margen de tamaño fenómeno social, hoy empieza una nueva sección:
hablar de fútbol también es gratis
Si bien no prometo precisión científica, intentaré poner mi más agudo ojo crítico frente a la realidad futbolística, tanto en lo que respecta a lo deportivo, pero sobre todo, a lo simbólico. Porque... ¿hace falta aclarar que si improvisás, te comés cuatro goles?
Guarda Sardina, estás jugando con fuego al proponer una charla de café en un pais con 40.000.000 de técnicos y una internet con una boooooooooooooooooooooooooooooooooooooocha de internautas hispanohablantes que te leen. Igual la idea me copa, y si vas a jugar con fuego, sabé que voy a estar detrás tuyo con un extinguidor por las dudas.
ResponderEliminarJajaja, gracias Perro reconfortado! Siempre conté contigo!!!
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